Uno de cada cuatro trabajadores señala que la mayor parte de los días experimenta síntomas de malestar emocional tales como dolor o tensión muscular (25.4%), sentirse ansioso o con los «nervios de punta» (24.7%), cansancio físico (19.3%), inquietud motora (18.7%), sensación de poca energía (16.6%), dificultades para concentrarse (11.8%) y dificultades para controlar la preocupación (10%).